Estrategia para Gestionar la Inclusiòn

La inclusión en la Escuela, abarca lo que vemos en  en nuestra sociedad.  En esta ocasión me referiré a lo que sucede al interior de la Escuela cuando ingresan a 7º o 8º Bàsico alumnos/as que tienen 4 o 5 años de diferencia ( son mayores). con el grupo curso que en su mayoría vienen desde pre-kinder o kinder juntos y tienen una edad promedio de 13 años.
Es otra de las situaciones sociales-educativas que están presentes en las Escuelas Municipales,  estudiantes que llegan, con experiencias previas bastantes complejas, especialmente porque vienen de haber estado en mas de tres colegios anteriormente, repitencias, bajo rendimiento escolar y no los reciben en sus Colegios de origen principalmente por conflictos conductuales que se han generado,  por las criticas permanentes por su desempeño académico y que han generado baja autoestima y/o conductas no aceptadas y principalmente no atendidas por los adultos que tienen esa responsabilidad..
¿Como evitar que estas conductas se repitan en la nueva Escuela y continuar con el circulo negativo?.
Una de las estrategias que han resultado eficientes, es el compromiso de asume el equipo directivo en este nuevo proceso de integración del alumno/a a esta Escuela. Junto con recibir el apoyo del equipo psicosocial, que a la vez involucra a la familia, padre, madre, tíos o quien esté a cargo del menor, en este proceso, la participación de la Dirección, Inspector, Jefe de UTP y Orientadora en el rol de padrino o madrina al interior de la Escuela es la estrategia que efectivamente revierte la situación de ingreso inicial, transformándola en una experiencia de aprendizaje y de crecimiento personal para el alumno/a, que en ocasiones le permite llegar a ser el estudiante mas activo, comprometido y con logros académicos inesperados.
 Cundo un Director/a, tiene un estudiante o mas a su cargo, logrando una cercanía significativa,  acompañamiento y seguimiento de ese alumno y siente que hay una atención especial por el o ella, la reacción es tan positiva, por todo lo que implica este compromiso, que se transforma en la mejor experiencia de la la Educación Básica para el estudiante como para el Directivo.
Todos las Directoras/es que lideramos Escuela con alumnos/as que llegan desfasados en edad, con interés diferentes, tenemos que actuar bajo una estrategia  con ellos/as y sistemáticamente realizar seguimiento, compañía y retroalimentación del proceso de aprendizaje  de adaptación al curso y el ambiente escolar.
La inclusión realizada con un procedimiento  bien claro , preciso  y asumido con compromiso y convencimiento que el alumno/a puede superarse y tener muchos logros académicos y sociales.